No solamente en los momentos difíciles de nuestra vida, sino siempre, el acudir a María para que nos ayude es un seguro que nos mantendrá firmes en la fe, sosegados ante los problemas cotidianos y reconfortados con nosotros mismos. Ella, que es madre nuestra, nunca nos dejará solos frente a los peligros, por muchos y grandes que éstos sean. Tengámoslo siempre presente en nuestros quehaceres.

Solamente si nos reconocemos pequeños, pecadores y mendigos del perdón de nuestro Padre Dios y del de los hermanos, podremos transitar por la senda de




![Señor, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino (Cristo Rey) [Rezando al caer de la tarde] Señor, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino (Cristo Rey) [Rezando al caer de la tarde]](https://live.staticflickr.com/65535/54939245647_c5d636324d_h.jpg)
