El misterio de la Santísima Trinidad es el misterio del amor total de un Dios que busca el bien de todos y cada uno de los seres humanos. ¡Qué inmensa suerte la nuestra tener a un Dios que ama a sus criaturas! Un Dios que nos ha dejado la libertad para construir una comunidad de amor. Un Dios que perdona continuamente nuestras ingratitudes. Un Dios que paga nuestro rescate con la vida de su propio Hijo. No hay amor más grande. Es lo que celebramos en este misterio del Dios que es Padre, es Hijo y es Espíritu Santo.
¡Basta de quejas sobre lo mal que está todo! ¡Basta de añoranzas de pasados tiempos que, al parecer, fueron mejores! Compartamos la alegría de ser