Espíritu Santo, fuego y viento, fuente de energía renovable y renovadora
Ha llegado la hora de recibir una nueva energía que no contamina la libertad de la persona, pero que si impulsa a vivir plenamente la vida. Es la Energía del Espíritu Santo, que en este día de Pentecostés arranca de nosotros todo lo que nos paraliza y nos envía a ser testigo de la Alegría de Jesús. El Espíritu Santo nos saca del confinamiento del egoismo y nos hace ser IGLESIA EN SALIDA.
¡FELIZ PENTECOSTÉS!
Feliz Domingo. Buena semana.
Francisco José Ruiz Guillot