¿Dónde eliges poner tu corazón?
¡No podemos tener el corazón partido! Tenemos que redescubrir donde están las cosas importantes de la vida. El que quiere seguir a Jesús tiene que ser astuto y buscar una estrategia fuerte para poder vencer a las tentaciones de la desgana, el interés personalista, las fuerzas del tener y del ser.
Con la parábola de este domingo Jesús desvía nuestra mirada hacia la profundidad de su corazón y nos ayuda a comprender lo que significa la Bienaventuranza de los limpios de corazón, que supone disfrutar del proyecto de Dios.
Feliz domingo. Buena semana.
Francisco José Ruiz Guillot